Parallel Verses
- Nueva Versión Internacional - La mayor tuvo un hijo, a quien llamó Moab, padre de los actuales moabitas.
- 新标点和合本 - 大女儿生了儿子,给他起名叫摩押,就是现今摩押人的始祖。
- 和合本2010(上帝版-简体) - 大女儿生了儿子,给他起名叫摩押,就是现今摩押人的始祖。
- 和合本2010(神版-简体) - 大女儿生了儿子,给他起名叫摩押,就是现今摩押人的始祖。
- 当代译本 - 大女儿生了一个儿子,给他取名叫摩押 ,他是今天摩押人的祖先。
- 圣经新译本 - 大女儿生了一个儿子,给他起名叫摩押,就是现在摩押人的始祖。
- 中文标准译本 - 大女儿生了一个儿子,给他起名为摩押,他就是今天摩押人的始祖。
- 现代标点和合本 - 大女儿生了儿子,给他起名叫摩押,就是现今摩押人的始祖。
- 和合本(拼音版) - 大女儿生了儿子,给他起名叫摩押,就是现今摩押人的始祖;
- New International Version - The older daughter had a son, and she named him Moab ; he is the father of the Moabites of today.
- New International Reader's Version - The older daughter had a son. She named him Moab. He’s the father of the Moabites of today.
- English Standard Version - The firstborn bore a son and called his name Moab. He is the father of the Moabites to this day.
- New Living Translation - When the older daughter gave birth to a son, she named him Moab. He became the ancestor of the nation now known as the Moabites.
- Christian Standard Bible - The firstborn gave birth to a son and named him Moab. He is the father of the Moabites of today.
- New American Standard Bible - The firstborn gave birth to a son, and named him Moab; he is the father of the Moabites to this day.
- New King James Version - The firstborn bore a son and called his name Moab; he is the father of the Moabites to this day.
- Amplified Bible - The firstborn gave birth to a son, and named him Moab (from father); he is the father of the Moabites to this day.
- American Standard Version - And the first-born bare a son, and called his name Moab: the same is the father of the Moabites unto this day.
- King James Version - And the firstborn bare a son, and called his name Moab: the same is the father of the Moabites unto this day.
- New English Translation - The older daughter gave birth to a son and named him Moab. He is the ancestor of the Moabites of today.
- World English Bible - The firstborn bore a son, and named him Moab. He is the father of the Moabites to this day.
- 新標點和合本 - 大女兒生了兒子,給他起名叫摩押,就是現今摩押人的始祖。
- 和合本2010(上帝版-繁體) - 大女兒生了兒子,給他起名叫摩押,就是現今摩押人的始祖。
- 和合本2010(神版-繁體) - 大女兒生了兒子,給他起名叫摩押,就是現今摩押人的始祖。
- 當代譯本 - 大女兒生了一個兒子,給他取名叫摩押 ,他是今天摩押人的祖先。
- 聖經新譯本 - 大女兒生了一個兒子,給他起名叫摩押,就是現在摩押人的始祖。
- 呂振中譯本 - 大女兒生個兒子,給他起名叫 摩押 ,就是今日 摩押 人的始祖。
- 中文標準譯本 - 大女兒生了一個兒子,給他起名為摩押,他就是今天摩押人的始祖。
- 現代標點和合本 - 大女兒生了兒子,給他起名叫摩押,就是現今摩押人的始祖。
- 文理和合譯本 - 長女生子、命名摩押、為摩押族之祖、
- 文理委辦譯本 - 長女生子、命名摩押、為摩押族之祖。
- 施約瑟淺文理新舊約聖經 - 長女生子、命名 摩押 、即今 摩押 族之祖、
- 현대인의 성경 - 큰 딸은 아들을 낳아 이름을 모압이라고 지었는데 그는 오늘날 모압 사람들의 조상이 되었다.
- Новый Русский Перевод - Старшая дочь родила сына и назвала его Моав ; он – отец нынешних моавитян.
- Восточный перевод - Старшая дочь родила сына и назвала его Моав («от отца»); он отец нынешних моавитян.
- Восточный перевод, версия с «Аллахом» - Старшая дочь родила сына и назвала его Моав («от отца»); он отец нынешних моавитян.
- Восточный перевод, версия для Таджикистана - Старшая дочь родила сына и назвала его Моав («от отца»); он отец нынешних моавитян.
- La Bible du Semeur 2015 - L’aînée eut un fils qu’elle appela Moab (Issu du père) ; c’est l’ancêtre des Moabites qui existent encore aujourd’hui.
- リビングバイブル - やがて生まれた姉の子はモアブと名づけられ、モアブ人の先祖となりました。
- Nova Versão Internacional - A mais velha teve um filho e deu-lhe o nome de Moabe ; este é o pai dos moabitas de hoje.
- Hoffnung für alle - Die Ältere bekam einen Sohn und nannte ihn Moab (»von meinem Vater«). Er wurde der Stammvater der Moabiter.
- Kinh Thánh Hiện Đại - Cô chị sinh một con trai và đặt tên Mô-áp. Ông là tổ phụ của dân tộc Mô-áp ngày nay.
- พระคริสตธรรมคัมภีร์ไทย ฉบับอมตธรรมร่วมสมัย - บุตรสาวคนโตมีบุตรชาย และนางตั้งชื่อเขาว่าโมอับ เขาเป็นบรรพบุรุษของชาวโมอับในปัจจุบัน
- พระคัมภีร์ ฉบับแปลใหม่ - คนหัวปีได้บุตรชาย และตั้งชื่อเขาว่า โมอับ เขาเป็นบิดาต้นตระกูลของชาวโมอับมาจนถึงทุกวันนี้
Cross Reference
- Deuteronomio 23:3 - »No podrán entrar en la asamblea del Señor los amonitas ni los moabitas, ni ninguno de sus descendientes, hasta la décima generación.
- Números 24:1 - Pero, cuando Balán se dio cuenta de que al Señor le complacía que se bendijera a Israel, no recurrió a la hechicería, como otras veces, sino que volvió su rostro hacia el desierto.
- Números 24:2 - Cuando Balán alzó la vista y vio a Israel acampando por tribus, el Espíritu del Señor vino sobre él;
- Números 24:3 - entonces pronunció su oráculo: «Palabras de Balán hijo de Beor; palabras del varón clarividente.
- Números 24:4 - Palabras del que oye las palabras de Dios, del que contempla la visión del Todopoderoso, del que cae en trance y tiene visiones.
- Números 24:5 - »¡Cuán hermosas son tus tiendas, Jacob! ¡Qué bello es tu campamento, Israel!
- Números 24:6 - Son como arroyos que se ensanchan, como jardines a la orilla del río, como áloes plantados por el Señor, como cedros junto a las aguas.
- Números 24:7 - Sus cántaros rebosan de agua; su semilla goza de agua abundante. Su rey es más grande que Agag; su reinado se engrandece.
- Números 24:8 - »Dios los sacó de Egipto con la fuerza de un toro salvaje. Israel devora a las naciones hostiles y les parte los huesos; ¡las atraviesa con sus flechas!
- Números 24:9 - Se agacha como un león, se tiende como una leona: ¿quién se atreverá a molestarlo? ¡Benditos sean los que te bendigan! ¡Malditos sean los que te maldigan!»
- Números 24:10 - Entonces la ira de Balac se encendió contra Balán, y chasqueando los dedos le dijo: —Te mandé llamar para que echaras una maldición sobre mis enemigos, ¡y estas tres veces no has hecho sino bendecirlos!
- Números 24:11 - ¡Más te vale volver a tu tierra! Prometí que te recompensaría, pero esa recompensa te la ha negado el Señor.
- Números 24:12 - Balán le contestó: —Yo les dije a los mensajeros que me enviaste:
- Números 24:13 - “Aun si Balac me diera su palacio lleno de oro y de plata, yo no podría hacer nada bueno ni malo, sino ajustarme al mandamiento del Señor mi Dios. Lo que el Señor me ordene decir, eso diré”.
- Números 24:14 - Ahora que vuelvo a mi pueblo, voy a advertirte en cuanto a lo que este pueblo hará con tu pueblo en los días postreros.
- Números 24:15 - Entonces Balán pronunció su oráculo: «Palabras de Balán hijo de Beor, palabras del varón clarividente.
- Números 24:16 - Palabras del que oye las palabras de Dios y conoce el pensamiento del Altísimo; del que contempla la visión del Todopoderoso, del que cae en trance y tiene visiones:
- Números 24:17 - »Lo veo, pero no ahora; lo contemplo, pero no de cerca. Una estrella saldrá de Jacob; un rey surgirá en Israel. Aplastará las sienes de Moab y el cráneo de todos los hijos de Set.
- Números 24:18 - Edom será conquistado; Seír, su enemigo, será dominado, mientras que Israel hará proezas.
- Números 24:19 - De Jacob saldrá un soberano, y destruirá a los sobrevivientes de Ar».
- Números 24:20 - Balán miró a Amalec y pronunció este oráculo: «Amalec fue el primero entre las naciones, pero su fin será la destrucción total».
- Números 24:21 - Luego miró Balán al quenita y pronunció este oráculo: «Aunque tienes una morada segura y tu nido está sobre las rocas,
- Números 24:22 - tú, Caín, estás destinado al fuego, y Asiria te llevará cautivo».
- Números 24:23 - Entonces Balán pronunció este oráculo: «¡Ay!, ¿quién seguirá con vida cuando Dios determine hacer esto?
- Números 24:24 - Vendrán barcos desde las costas de Chipre, que oprimirán a Asiria y a Éber, pues ellos también serán destruidos».
- Números 24:25 - Después de esto Balán se levantó y volvió a su tierra, y también Balac se fue por su camino.
- Rut 4:10 - y de que he tomado como esposa a Rut la moabita, viuda de Majlón, a fin de preservar el nombre del difunto con su heredad, para que su nombre no desaparezca de entre su familia ni de los registros del pueblo. ¡Hoy son ustedes testigos!
- Deuteronomio 2:19 - Cuando lleguen a la frontera de los amonitas, no los ataquen ni los provoquen a la guerra, porque no les daré a ustedes ninguna porción de su territorio. Esa tierra se la he dado por herencia a los descendientes de Lot”.
- Números 21:29 - ¡Ay de ti, Moab! ¡Estás destruido, pueblo de Quemós! Tu dios convirtió a tus hijos en fugitivos y a tus hijas en prisioneras de Sijón, rey de los amorreos.
- 2 Reyes 3:1 - En el año dieciocho de Josafat, rey de Judá, Jorán hijo de Acab ascendió al trono de Israel en Samaria, y reinó doce años.
- 2 Reyes 3:2 - Jorán hizo lo que ofende al Señor, aunque no tanto como su padre y su madre, pues mandó que se quitara una piedra sagrada que su padre había erigido en honor de Baal.
- 2 Reyes 3:3 - Sin embargo, Jorán se aferró a los mismos pecados con que Jeroboán hijo de Nabat había hecho pecar a los israelitas, pues no se apartó de esos pecados.
- 2 Reyes 3:4 - Ahora bien, Mesá, rey de Moab, criaba ovejas, y como tributo anual le entregaba al rey de Israel cien mil ovejas y la lana de cien mil corderos.
- 2 Reyes 3:5 - Pero, al morir Acab, el rey de Moab se rebeló contra el rey de Israel.
- 2 Reyes 3:6 - Entonces el rey Jorán salió de Samaria, movilizó a todo el ejército de Israel,
- 2 Reyes 3:7 - y le envió este mensaje a Josafat, rey de Judá: —El rey de Moab se ha rebelado contra mí. ¿Irías conmigo a pelear contra Moab? —Claro que sí —le respondió Josafat—. Estoy a tu disposición, lo mismo que mi ejército y mi caballería.
- 2 Reyes 3:8 - ¿Qué ruta tomaremos? —La ruta del desierto de Edom —contestó Jorán.
- 2 Reyes 3:9 - Fue así como los reyes de Israel, Judá y Edom se pusieron en marcha. Durante siete días anduvieron por el desierto, hasta que el ejército y los animales se quedaron sin agua.
- 2 Reyes 3:10 - —¡Ay! —exclamó el rey de Israel—. ¡El Señor ha reunido a tres reyes para entregarlos en manos de los moabitas!
- 2 Reyes 3:11 - Pero Josafat preguntó: —¿Acaso no hay aquí un profeta del Señor, para que consultemos al Señor por medio de él? Un oficial del rey de Israel contestó: —Aquí cerca está Eliseo hijo de Safat, el que servía a Elías.
- 2 Reyes 3:12 - —Pues él puede darnos palabra del Señor —comentó Josafat. Así que el rey de Israel fue a ver a Eliseo, acompañado de Josafat y del rey de Edom.
- 2 Reyes 3:13 - Pero Eliseo le dijo al rey de Israel: —¿Qué tengo yo que ver con usted? Váyase a consultar a los profetas de su padre y de su madre. —No —respondió el rey de Israel—, pues el Señor nos ha reunido a los tres para entregarnos en manos de los moabitas.
- 2 Reyes 3:14 - Eliseo replicó: —Le juro que si no fuera por el respeto que le tengo a Josafat, rey de Judá, ni siquiera le daría a usted la cara. ¡Tan cierto como que vive el Señor Todopoderoso, a quien sirvo!
- 2 Reyes 3:15 - En fin, ¡que me traigan un músico! Mientras el músico tañía el arpa, la mano del Señor vino sobre Eliseo,
- 2 Reyes 3:16 - y este dijo: —Así dice el Señor: “Abran zanjas por todo este valle,
- 2 Reyes 3:17 - pues aunque no vean viento ni lluvia —dice el Señor—, este valle se llenará de agua, de modo que podrán beber ustedes y todos sus animales”.
- 2 Reyes 3:18 - Esto es poca cosa para el Señor, que además entregará a Moab en manos de ustedes.
- 2 Reyes 3:19 - De hecho, ustedes destruirán todas las ciudades fortificadas y las otras ciudades principales. Cortarán los mejores árboles, cegarán los manantiales y sembrarán de piedras los campos fértiles.
- 2 Reyes 3:20 - A la mañana siguiente, a la hora de la ofrenda, toda el área se inundó con el agua que venía de la región de Edom.
- 2 Reyes 3:21 - Ahora bien, cuando los moabitas se enteraron de que los reyes habían salido para atacarlos, movilizaron a todos los que podían servir en el ejército y tomaron posiciones en la frontera.
- 2 Reyes 3:22 - Al levantarse ellos por la mañana, el sol se reflejaba sobre el agua, y a los moabitas les pareció que estaba teñida en sangre.
- 2 Reyes 3:23 - «¡Es sangre de batalla! —exclamaron—. Esos reyes deben de haber peleado, y se han matado unos a otros. ¡Vamos, Moab, al saqueo!»
- 2 Reyes 3:24 - Cuando los moabitas llegaron al campamento de Israel, los israelitas les hicieron frente y los derrotaron. Aquellos se dieron a la fuga, pero los israelitas los persiguieron y los aniquilaron,
- 2 Reyes 3:25 - y destruyeron sus ciudades. Cada uno tiró una piedra en los campos fértiles de Moab hasta llenarlos; además, cegaron los manantiales y cortaron los mejores árboles. Solo Quir Jaréset quedó en pie, aunque los honderos la cercaron y también lograron conquistarla.
- 2 Reyes 3:26 - El rey de Moab, al ver que perdía la batalla, se llevó consigo a setecientos guerreros con el propósito de abrirse paso hasta donde estaba el rey de Edom, pero no logró pasar.
- 2 Reyes 3:27 - Tomó entonces a su hijo primogénito, que había de sucederlo en el trono, y lo ofreció en holocausto sobre la muralla. A raíz de esto, se desató contra Israel una furia incontenible, de modo que los israelitas tuvieron que retirarse y volver a su país.
- Jueces 3:1 - Las siguientes naciones son las que el Señor dejó a salvo para poner a prueba a todos los israelitas que no habían participado en ninguna de las guerras de Canaán.
- Jueces 3:2 - Lo hizo solamente para que los descendientes de los israelitas, que no habían tenido experiencia en el campo de batalla, aprendieran a combatir.
- Jueces 3:3 - Quedaron los cinco príncipes de los filisteos, todos los cananeos, y los sidonios y heveos que vivían en los montes del Líbano, desde el monte de Baal Hermón hasta Lebó Jamat.
- Jueces 3:4 - Allí los dejó el Señor para poner a prueba a los israelitas, a ver si obedecían sus mandamientos, que él había dado a sus antepasados por medio de Moisés.
- Jueces 3:5 - Los israelitas vivían entre cananeos, hititas, amorreos, ferezeos, heveos y jebuseos.
- Jueces 3:6 - Se casaron con las hijas de esos pueblos, y a sus propias hijas las casaron con ellos y adoraron a sus dioses.
- Jueces 3:7 - Los israelitas hicieron lo que ofende al Señor; se olvidaron del Señor su Dios, y adoraron a las imágenes de Baal y de Aserá.
- Jueces 3:8 - El Señor se enfureció contra Israel a tal grado que los vendió a Cusán Risatayin, rey de Aram Najarayin, a quien estuvieron sometidos durante ocho años.
- Jueces 3:9 - Pero clamaron al Señor, y él hizo que surgiera un libertador, Otoniel hijo de Quenaz, hermano menor de Caleb. Y Otoniel liberó a los israelitas.
- Jueces 3:10 - El Espíritu del Señor vino sobre Otoniel, y así Otoniel se convirtió en caudillo de Israel y salió a la guerra. El Señor entregó a Cusán Risatayin, rey de Aram, en manos de Otoniel, quien prevaleció sobre él.
- Jueces 3:11 - El país tuvo paz durante cuarenta años, hasta que murió Otoniel hijo de Quenaz.
- Jueces 3:12 - Una vez más los israelitas hicieron lo que ofende al Señor, y por causa del mal que hicieron, el Señor le dio poder sobre ellos a Eglón, rey de Moab.
- Jueces 3:13 - Luego de aliarse con los amonitas y los amalecitas, Eglón fue y atacó a Israel, y se apoderó de la Ciudad de las Palmeras.
- Jueces 3:14 - Los israelitas estuvieron sometidos a Eglón, rey de Moab, durante dieciocho años.
- Jueces 3:15 - Los israelitas volvieron a clamar al Señor, y el Señor les levantó un libertador, Aod hijo de Guerá, de la tribu de Benjamín, quien era zurdo. Por medio de él los israelitas enviaron tributo a Eglón, rey de Moab.
- Jueces 3:16 - Aod se había hecho un puñal de doble filo como de treinta centímetros de largo, el cual sujetó a su muslo derecho por debajo de la ropa.
- Jueces 3:17 - Le presentó el tributo a Eglón, rey de Moab, que era muy gordo.
- Jueces 3:18 - Cuando Aod terminó de presentárselo, se fue a despedir a los hombres que habían transportado el tributo.
- Jueces 3:19 - Pero luego se regresó desde las canteras que estaban cerca de Guilgal, y dijo: —Majestad, tengo un mensaje secreto para usted. —¡Silencio! —ordenó el rey. Y todos sus servidores se retiraron de su presencia.
- Jueces 3:20 - Entonces Aod se acercó al rey, que estaba sentado solo en la habitación del piso superior de su palacio de verano, y le dijo: —Tengo un mensaje de Dios para usted. Cuando el rey se levantó de su trono,
- Jueces 3:21 - Aod extendió la mano izquierda, sacó el puñal que llevaba en el muslo derecho, y se lo clavó al rey en el vientre.
- Jueces 3:22 - La empuñadura se hundió tras la hoja, a tal punto que esta le salió por la espalda. Además, Aod no le sacó el puñal, ya que este quedó totalmente cubierto por la gordura.
- Jueces 3:23 - Luego de cerrar y atrancar las puertas de la habitación del piso superior, Aod salió por la ventana.
- Jueces 3:24 - Cuando ya Aod se había ido, llegaron los siervos del rey y, al ver atrancadas las puertas de la habitación del piso superior, dijeron: «Tal vez está haciendo sus necesidades en el cuarto interior de la casa».
- Jueces 3:25 - Y tanto esperaron que se sintieron desconcertados. Al ver que el rey no abría las puertas de la habitación, las abrieron con una llave. Allí encontraron a su señor tendido en el piso, ya muerto.
- Jueces 3:26 - Mientras esperaban, Aod se escapó. Pasó junto a las canteras y huyó a Seirat.
- Jueces 3:27 - Cuando llegó allí, tocó la trompeta en la región montañosa de Efraín, y los israelitas descendieron de la montaña, con él a la cabeza.
- Jueces 3:28 - «Síganme —les ordenó—, porque el Señor ha entregado en manos de ustedes a sus enemigos los moabitas». Bajaron con él y, tomando posesión de los vados del Jordán que conducían a Moab, no dejaron pasar a nadie.
- Jueces 3:29 - En aquella ocasión derrotaron a unos diez mil moabitas, todos robustos y aguerridos. No escapó ni un solo hombre.
- Jueces 3:30 - Aquel día Moab quedó sometido a Israel, y el país tuvo paz durante ochenta años.
- Jueces 3:31 - El sucesor de Aod fue Samgar hijo de Anat, quien derrotó a seiscientos filisteos con una vara para arrear bueyes. También él liberó a Israel.
- 2 Samuel 8:1 - Pasado algún tiempo, David derrotó a los filisteos y los subyugó, quitándoles el control de Méteg Amá.
- 2 Samuel 8:2 - También derrotó a los moabitas, a quienes obligó a tenderse en el suelo y midió con un cordel; a los que cabían a lo largo de dos medidas los condenó a muerte, pero dejó con vida a los que quedaban dentro de la medida siguiente. Fue así como los moabitas pasaron a ser vasallos tributarios de David.
- 2 Samuel 8:3 - Además, David derrotó a Hadad Ezer, hijo del rey Rejob de Sobá, cuando Hadad Ezer trató de restablecer su dominio sobre la región del río Éufrates.
- 2 Samuel 8:4 - David le capturó mil carros, siete mil jinetes y veinte mil soldados de infantería; también desjarretó los caballos de tiro, aunque dejó los caballos suficientes para cien carros.
- 2 Samuel 8:5 - Luego, cuando los sirios de Damasco acudieron en auxilio de Hadad Ezer, rey de Sobá, David aniquiló a veintidós mil de ellos.
- 2 Samuel 8:6 - También puso guarniciones en Damasco, de modo que los sirios pasaron a ser vasallos tributarios de David. En todas las campañas de David, el Señor le daba la victoria.
- 2 Samuel 8:7 - En cuanto a los escudos de oro que llevaban los oficiales de Hadad Ezer, David se apropió de ellos y los trasladó a Jerusalén.
- 2 Samuel 8:8 - Así mismo se apoderó de una gran cantidad de bronce que había en Tébaj y Berotay, poblaciones de Hadad Ezer.
- 2 Samuel 8:9 - Tou, rey de Jamat, se enteró de que David había derrotado por completo al ejército de Hadad Ezer.
- 2 Samuel 8:10 - Como Tou también era enemigo de Hadad Ezer, envió a su hijo Jorán a desearle bienestar al rey David, y a felicitarlo por haber derrotado a Hadad Ezer en batalla. Jorán llevó consigo objetos de plata, de oro y de bronce,
- 2 Samuel 8:11 - los cuales el rey David consagró al Señor, tal como lo había hecho con la plata y el oro de las otras naciones que él había subyugado:
- 2 Samuel 8:12 - Edom, Moab, los amonitas, los filisteos y los amalecitas. También consagró el botín que le había quitado a Hadad Ezer, hijo del rey Rejob de Sobá.
- 2 Samuel 8:13 - La fama de David creció aún más cuando regresó victorioso del valle de la Sal, donde aniquiló a dieciocho mil edomitas.
- 2 Samuel 8:14 - También puso guarniciones en Edom; las estableció por todo el país, de modo que los edomitas pasaron a ser vasallos tributarios de David. En todas sus campañas, el Señor le daba la victoria.
- 2 Samuel 8:15 - David reinó sobre todo Israel, gobernando al pueblo entero con justicia y rectitud.
- 2 Samuel 8:16 - Joab hijo de Sarvia era general del ejército; Josafat hijo de Ajilud era el secretario;
- 2 Samuel 8:17 - Sadoc hijo de Ajitob y Ajimélec hijo de Abiatar eran sacerdotes; Seraías era el cronista;
- 2 Samuel 8:18 - Benaías hijo de Joyadá estaba al mando de los soldados quereteos y peleteos, y los hijos de David eran ministros.
- Números 22:1 - Los israelitas se pusieron otra vez en marcha, y acamparon en las estepas de Moab, al otro lado del Jordán, a la altura de Jericó.
- Números 22:2 - Cuando Balac hijo de Zipor se dio cuenta de todo lo que Israel había hecho con los amorreos,
- Números 22:3 - los moabitas sintieron mucho miedo de los israelitas. Estaban verdaderamente aterrorizados de ellos, porque eran un ejército muy numeroso.
- Números 22:4 - Entonces dijeron los moabitas a los ancianos de Madián: «¡Esta muchedumbre barrerá con todo lo que hay a nuestro alrededor, como cuando el ganado barre con la hierba del campo!» En aquel tiempo, Balac hijo de Zipor era rey de Moab,
- Números 22:5 - así que mandó llamar a Balán hijo de Beor, quien vivía en Petor, a orillas del río Éufrates, en la tierra de los amavitas. Balac mandó a decirle: «Hay un pueblo que salió de Egipto, y que ahora cubre toda la tierra y ha venido a asentarse cerca de mí.
- Números 22:6 - Te ruego que vengas y maldigas por mí a este pueblo, porque es más poderoso que yo. Tal vez así pueda yo vencerlos y echarlos fuera del país. Yo sé que a quien tú bendices, queda bendito, y a quien tú maldices, queda maldito».
- Números 22:7 - Los ancianos de Moab y de Madián fueron a darle a Balán el mensaje que Balac le enviaba, y llevaron consigo dinero para pagarle sus conjuros.
- Números 22:8 - Balán los invitó a pasar allí la noche, prometiendo comunicarles después lo que el Señor le dijera. Y los gobernantes se alojaron con él.
- Números 22:9 - Dios se le apareció a Balán, y le dijo: —¿Quiénes son estos hombres que se alojan contigo?
- Números 22:10 - Balán le respondió: —Son los mensajeros que envió Balac hijo de Zipor, que es el rey de Moab. Los envió a decirme:
- Números 22:11 - “Un pueblo que salió de Egipto cubre ahora toda la tierra. Ven y échales una maldición por mí. Tal vez así pueda yo luchar contra ellos y echarlos fuera de mi territorio”.
- Números 22:12 - Pero Dios le dijo a Balán: —No irás con ellos, ni pronunciarás ninguna maldición sobre los israelitas, porque son un pueblo bendito.
- Números 22:13 - Al otro día Balán se levantó y les dijo a los gobernantes enviados por Balac: «Regresen a su tierra, porque el Señor no quiere que yo vaya con ustedes».
- Números 22:14 - Los gobernantes moabitas regresaron adonde estaba Balac y le dijeron: «Balán no quiere venir con nosotros».
- Números 22:15 - Balac envió entonces a otros gobernantes, más numerosos y distinguidos que los primeros,
- Números 22:16 - quienes fueron y le dijeron a Balán: —Esto es lo que dice Balac hijo de Zipor: “No permitas que nada te impida venir a verme,
- Números 22:17 - porque yo te recompensaré con creces y haré todo lo que tú me pidas. Te ruego que vengas y maldigas por mí a este pueblo”.
- Números 22:18 - Pero Balán le respondió: —Aun si Balac me diera su palacio lleno de oro y de plata, yo no podría hacer nada grande ni pequeño, sino ajustarme al mandamiento del Señor mi Dios.
- Números 22:19 - Ustedes pueden también alojarse aquí esta noche, mientras yo averiguo si el Señor quiere decirme alguna otra cosa.
- Números 22:20 - Aquella noche Dios se le apareció a Balán y le dijo: «Ya que estos hombres han venido a llamarte, ve con ellos, pero solo harás lo que yo te ordene».
- Números 22:21 - Balán se levantó por la mañana, ensilló su burra, y partió con los gobernantes de Moab.
- Números 22:22 - Mientras iba con ellos, la ira de Dios se encendió y en el camino el ángel del Señor se hizo presente, dispuesto a no dejarlo pasar. Balán iba montado en su burra, y sus dos criados lo acompañaban.
- Números 22:23 - Cuando la burra vio al ángel del Señor en medio del camino, con la espada desenvainada, se apartó del camino para meterse en el campo. Pero Balán la golpeó para hacerla volver al camino.
- Números 22:24 - El ángel del Señor se detuvo en un sendero estrecho que estaba entre dos viñas, con cercos de piedra en ambos lados.
- Números 22:25 - Cuando la burra vio al ángel del Señor, se arrimó contra la pared, con lo que lastimó el pie de Balán. Entonces Balán volvió a pegarle.
- Números 22:26 - El ángel del Señor se les adelantó y se detuvo en un lugar más estrecho, donde ya no había hacia dónde volverse.
- Números 22:27 - Cuando la burra vio al ángel del Señor, se echó al suelo con Balán encima. Entonces se encendió la ira de Balán y golpeó a la burra con un palo.
- Números 22:28 - Pero el Señor hizo hablar a la burra, y ella le dijo a Balán: —¿Se puede saber qué te he hecho, para que me hayas pegado tres veces?
- Números 22:29 - Balán le respondió: —¡Te has venido burlando de mí! Si hubiera tenido una espada en la mano, te habría matado de inmediato.
- Números 22:30 - La burra le contestó a Balán: —¿Acaso no soy la burra sobre la que siempre has montado, hasta el día de hoy? ¿Alguna vez te hice algo así? —No —respondió Balán.
- Números 22:31 - El Señor abrió los ojos de Balán, y este pudo ver al ángel del Señor en el camino y empuñando la espada. Balán se inclinó entonces y se postró rostro en tierra.
- Números 22:32 - El ángel del Señor le preguntó: —¿Por qué golpeaste tres veces a tu burra? ¿No te das cuenta de que vengo dispuesto a no dejarte pasar porque he visto que tus caminos son malos?
- Números 22:33 - Cuando la burra me vio, se apartó de mí tres veces. De no haber sido por ella, tú estarías ya muerto y ella seguiría con vida.
- Números 22:34 - Balán le dijo al ángel del Señor: —He pecado. No me di cuenta de tu presencia en el camino para cerrarme el paso. Ahora bien, como esto te parece mal, voy a regresar.
- Números 22:35 - Pero el ángel del Señor le dijo a Balán: —Ve con ellos, pero limítate a decir solo lo que yo te mande. Y Balán se fue con los jefes que Balac había enviado.
- Números 22:36 - Cuando Balac se enteró de que Balán venía, salió a recibirlo en una ciudad moabita que está en la frontera del río Arnón.
- Números 22:37 - Balac le dijo a Balán: —¿Acaso no te mandé llamar? ¿Por qué no viniste a mí? ¿Crees que no soy capaz de recompensarte?
- Números 22:38 - —¡Bueno, ya estoy aquí! —contestó Balán—. Solo que no podré decir nada que Dios no ponga en mi boca.
- Números 22:39 - De allí se fueron Balán y Balac a Quiriat Jusot.
- Números 22:40 - Balac ofreció en sacrificio vacas y ovejas, y las compartió con Balán y los gobernantes que estaban con él.
- Números 22:41 - A la mañana siguiente, Balac llevó a Balán a Bamot Baal, desde donde Balán pudo ver parte del campamento israelita.
- Deuteronomio 2:9 - »El Señor también me dijo: “No ataquen a los moabitas, ni los provoquen a la guerra, porque no les daré a ustedes ninguna porción de su territorio. A los descendientes de Lot les he dado por herencia la región de Ar”».